Las bicicletas para Downhill son aparatos realmente extraordinarios, que están capacitados para sortear todo tipo de obstáculos y descender a máxima velocidad.
Las bicicletas para Downhill son aparatos realmente extraordinarios, que están capacitados para sortear todo tipo de obstáculos y descender a máxima velocidad. Debido a esas funcionalidades son completamente diferentes a cualquier otra bicicleta de montaña.
Normalmente las bicicletas para Downhill se utilizan en circuitos cortos, con elevada exigencia técnica. Existen modalidades tanto de competencia, como de exhibición. En ambos casos, se requiere de un aparato que sea muy eficiente y garantice al máximo la seguridad del conductor.
Atributos básicos de una bicicleta para Downhill
La principal característica de una bicicleta para Downhill es que cuenta con una suspensión trasera o central. Pueden ser de doble suspensión o rígidas y, en todo caso, con un recorrido de amortiguación muy amplio.
Estas bicicletas están diseñadas para soportar grandes golpes y caídas a gran velocidad. Tienen un diseño particular en el que el sillín se coloca en la ubicación más baja posible, manteniendo un ángulo de reclinación hacia atrás. Esa disposición es la más adecuada, debido a que en el descenso el ciclista va levantado casi todo el tiempo.
Lo usual es que este tipo de bicicletas sean más pesadas que otras similares. Los modelos de bicicletas para Downhill más livianos tiene un peso aproximado de 18 kilogramos. Otro de sus rasgos distintivos es el hecho de que la distancia entre los ejes suele ser mayor que la de otras bicis, para aportar un plus de estabilidad.
Las bicicletas para Downhill, en general, no tienen muchas opciones de desarrollo. Vienen prediseñadas para soportar diferentes tipos de descenso con obstáculos, con un buen grado de seguridad. Aún así, muchos de los conductores realizan ajustes en la suspensión, y a veces en la geometría, para que el aparato se adapte a algún tipo de prueba en particular.
Los cuadros de las bicicletas para Downhill
Los marcos de las bicicletas para Downhill dependen del tipo de suspensión que utilicen y son básicamente de tres clases. Están los que usan suspensión trasera con uniones a cuatro puntos, los de suspensión con pivote único y los que usan suspensión multi-link o de múltiples uniones. Cualquiera de estos marcos funciona muy bien, pero es frecuente que cada deportista se acomode mejor a uno, que a los otros dos.
Lo más común es que los cuadros para bicicletas para Downhill estén elaborados en aluminio. Recientemente algunos fabricantes que emplean fibra de carbono han incursionado también en los modelos para Downhill. Entre ellos se destacan Trek y Specialized, entre otros. Como la tecnología en este terreno ha avanzado mucho y la demanda ha crecido, las bicicletas para Downhill de carbono ya no son tan costosas como antes.
El Cromolio y las combinaciones de distintos tipos de materiales también son muy usados en la elaboración de bicicletas para Downhill. Por lo general, lo que se mezcla es fibra de carbono con acero, aluminio o titanio.
En cuanto a la talla, lo que generalmente se hace es medir la distancia horizontal que hay entre el tubo del telescopio y el tubo del asiento. A esta magnitud se le llama “longitud efectiva del tubo superior” o “longitud efectiva del tubo horizontal”. La relación que se debe hacer es que entre más alto es el ciclista, mayor debe ser la longitud del tubo.
Sin embargo, los conocedores indican que un marco más pequeño otorga mayor maniobrabilidad, por lo que este factor debe ser tenido en cuenta a la hora de elegir la talla de la bicicleta para Downhill.