En 2016 las bicicletas Trek cumplen cuarenta años de éxito en el mercado. Nada mal para una compañía que lanzó su primer producto en un viejo almacén de Wisconsin que nadie conocía. Dick Burke y Roth Co fueron los creadores del milagro.
En 2016 las bicicletas Trek cumplen cuarenta años de éxito en el mercado. Nada mal para una compañía que lanzó su primer producto en un viejo almacén de Wisconsin que nadie conocía. Dick Burke y Roth Co fueron los creadores del milagro. Con un capital escaso y en apenas cinco años, lograron llevar a la cumbre una marca que se convertiría en leyenda.
En realidad, Las bicicletas Trek no necesitan presentación. La marca es considerada una de las mejores en todo el mundo. No por nada sus productos se comercializan en más de 90 países, a través de miles de distribuidores en varios continentes. Se venden más de un millón de bicicletas Trek cada año.
Las bicicletas Trek, una historia fascinante
Desde su creación, las bicicletas Trek tuvieron el objetivo de posicionarse dentro de las preferencias de los auténticos aficionados al ciclismo. Por eso la compañía Trek Bicycle Corporation renunció a comercializar sus productos a través de los almacenes de cadena: solo les interesaban las tiendas especializadas en el tema.
Al principio logró una gran popularidad vendiendo cuadros soldados a mano. Pero fue solo hasta 1986 cuando lanzaron su primer modelo de bicicleta de montaña. Este se convirtió en un hito de ventas; los conocedores destacaron su asiento, más cómodo que la mayoría, el espesor de las llantas y la funcionalidad de los engranajes. Ese mismo año salió al mercado la primera bicicleta Trek de carretera, elaborada en carbono, y a la que bautizaron “Modelo 2500”.
En 1990, Trek ya vendía también bicicletas estacionarias y capturaba cerca de la mitad del mercado de Estados Unidos en el renglón de bicicletas de montaña. Para 1991, la compañía facturaba 175 millones de dólares al año y tenía 700 empleados.
La tecnología: el secreto de las Trek
Desde un comienzo, las bicicletas Trek buscaron aplicar los más novedosos desarrollos tecnológicos a sus productos. Pero fue desde 1990 cuando este atributo se convirtió en un elemento distintivo de la marca.
Hacia 1992 se completó el desarrollo del proceso de laminado de fibra de carbono de óptima compactación bajo vacío (OCLV). Esto le permitió a Trek hacer los marcos para bicicleta más ligeros del mundo en ese entonces: pesaban solo 2,44 libras.
Fue por esa misma época cuando la compañía incursionó en la producción de cascos para ciclismo y lanzó su primera línea de bicicletas tándem (con más de una silla). Hacia 1994 ya se fabricaban 65 modelos diferentes, entre bicicletas de carretera, de montaña y tándem, además de una línea especial llamada “Trek niños”.
Al año siguiente salió al mercado un innovador marco en forma de “Y” para bicicletas de montaña. Eso le valió obtener el reconocimiento por “Diseño Sobresaliente y Premio de Ingeniería” de la revista Mecánica Popular. También fue en ese año cuando la compañía firmó un contrato con el legendario Greg LeMond para sacar una línea de bicicletas con su nombre.
Actualmente producen bicicletas de la más alta calidad y han logrado lo que todo fabricante de bicicletas sueña: marcar historia en las grandes competencias mundiales. Se quedaron nada más ni nada menos que con el récord de la hora en 2014, con el alemán Jens Voigt como conductor.
La historia de las bicicletas Trek es una historia de éxitos continuos. Poco a poco han ido convirtiéndose en un auténtico imperio. Seguramente seguirán reinando en el mercado, gracias a su filosofía de “Elaborar un producto de calidad, a un precio competitivo, con entrega a tiempo y en un ambiente positivo.”