¿Se te mojó el iPhone y no sabes qué hacer?
¡Lo primero es que lo retires del líquido y lo apagues inmediatamente!
Conserva la calma, ya que todavía es posible rescatarlo. De hecho, se conocen historias de iPhone que han sobrevivido a sumergirse en un lago durante varios minutos.
Tras apagar el iPhone —si todavía no se había apagado por sí mismo—, deberás proceder a secarlo lo mejor posible. Ni se te ocurra tratar de encender tu iPhone en este momento, ya que eso podría ocasionar un cortocircuito que lo dejaría completamente inservible.
Para secar el exterior de tu celular:
1. Retira la funda o la carcasa que tenga puesta, así como los accesorios y la SIM Card.
2. Usa una toalla o cualquier material absorbente para secarlo muy bien. Puedes darle un pequeño sacudón para retirar el agua de los puertos, pero trata de no moverlo demasiado, ya que el movimiento puede hacer que el líquido llegue hasta partes donde causaría más daño.
3. Concéntrate en los lugares por donde el agua podría introducirse en el dispositivo (los botones, el conector de audio, la entrada del cargador, el puerto de la SIM etc.). Para esto, puede ser útil usar un copito de algodón, o algún elemento con punta recubierto con una tela.
Luego de secar el exterior lo mejor que puedas, es hora de usar el famoso truco del arroz. Si por casualidad tienes paqueticos de gel de sílica —esos que vienen con los zapatos o con la ropa para evitar la humedad— a la mano o te queda fácil conseguirlos puedes usarlos ya que tienen una gran capacidad de absorición. Pero, de lo contrario, lo mejor es que uses arroz.
Secar el iPhone con arroz
Para esto, necesitarás:
- Arroz —funciona de cualquier tipo que no suelte polvillo.
- Una bolsa de cierre hermético —cualquiera que sea tipo zip-lock.
- Tiempo.
1. Llena la bolsa con suficiente arroz para que cubra tu iPhone por completo e introduce tu iPhone en el arroz.
2. Deja la bolsa reposando en un lugar seco y espera por lo menos 48 horas antes de sacarlo de ahí. Puede ser bueno que le dé un poco de sol para que el agua se evapore —pero no mucho!
3. Después de pasado el tiempo que consideres prudente, saca el iPhone del arroz y revisa si tiene signos de seguir conservando humedad. Si todavía parece tener humedad, no trates de encenderlo, déjalo secando un tiempo más. Si ya parece seco, prueba a encenderlo y ver qué pasa.
No intentes volver a cargar el teléfono hasta que hayan pasado por lo menos 72 horas. Una buena recomendación es cambiar la batería del dispositivo por una nueva.
Si el teléfono no enciende o tiene algún fallo, conserva la calma. Todavía es posible rescatarlo. Para esto, deberás comprobar cuál es el fallo y llevarlo a un centro de servicio técnico para que lo revisen y hagan las reparaciones necesarias.
Algunos posibles fallos que puede presentar tu iPhone tras mojarse son:
- El táctil del celular no funciona
- No funciona el conector de audio.
- No funciona el botón Home.
- No funcionan los botones de volumen
- El celular no enciende.
- Lo más probable es que sea la batería.
- No funciona el botón de encendido.
Los accidentes que involucran agua están entre las causas más frecuentes de daño de los iPhone. Así que en realidad tu caso no es una excepción.
Dependiendo del líquido con que se haya mojado el iPhone, el daño será mayor o menor. En todo caso, si tu teléfono presenta algún fallo después de realizar este proceso, llévalo a un centro de servicio técnico para que lo revisen. Sólo los especialistas podrán confirmarte si es posible repararlo o no.
El servicio técnico oficial de Apple y la garantía
En teoría, si tu iPhone se mojó la garantía original de Apple queda anulada. Para esto, cada modelo de iPhone trae un indicador de humedad que se activará si el teléfono estuvo en contacto con algún líquido:
Sin embargo, si tu teléfono todavía está en garantía lo mejor es que lo lleves a reparación por la garantía de todas formas, ya que en algunos casos es posible que acepten repararlo por la garantía.